México.- Hasta el momento 23 personas perdieron la vida y 70 resultaron heridas al caer un tren del metro de la Ciudad de México desde un puente que colapsó, de acuerdo a las informaciones ofrecidas por las autoridades.
“Lamentablemente son 23 los fallecidos, uno de ellos en un hospital”, señaló el día de hoy a periodistas la alcaldesa de la capital mexicana, Claudia Sheinbaum, quien previamente había reportado 20 muertos en este siniestro.
Cabe destacar que entre las víctimas hay menores de edad, indicó más temprano Sheinbaum, quien dio cuenta además de “siete heridos graves”.
En total 65 personas reciben atención en hospitales y otros pocos tuvieron lesiones leves y no necesitaron atención médica, agregó la alcaldesa en el puesto de mando instalado en el sitio de la tragedia, donde se podía observar parte del tren colgando del puente de unos 12 metros de altura.
En el lugar, un hombre esperaba noticias de su hermano, quien según él quedó atrapado en un vagón.
“Venía con su esposa y a ella la lograron sacar, pero él se quedó ahí aplastado y la verdad es que como no sabemos nada, no nos dan informes (…). Para que lo saquen, ¿quién sabe cuánto (tardarán)?”, declaró a la AFP.
Sheinbaum indicó que el siniestro se produjo al vencerse una viga del viaducto a la altura de la estación Olivos, cerca de las 22H00 locales (03H00 GMT).
Decenas de rescatistas y bomberos evacuaron a los pasajeros, entre fierros retorcidos y cables, según imágenes de la televisión local.
Ante el debilitamiento del tren, las labores tuvieron que ser suspendidas, pero luego fueron reanudadas con la ayuda de una grúa.
Varios heridos evacuaron por sus propios medios, detalló Sheinbaum.
– “Está mal esta construcción” –
Ricardo de la Torre, vecino del sector, comentó a la AFP que el paso del tren suele producir una fuerte vibración en las viviendas.
“Realmente en las mañanas, cuando empiezan a activarse los trenes, a tener su servicio, en las casas se siente. Por ese simple hecho nosotros sabemos que está mal esta construcción”, sostuvo.
Algunos lesionados llevaban cuellos ortopédicos y fueron trasladados en ambulancias, en medio de gritos y ruido de sirenas.